INTRODUCCIÓN
Desde el desarrollo del periodo Uruk Tardío, todas las características de desarrollo social, político y económico que hemos visto anteriormente también permitieron a las comunidades humanas de la Baja Mesopotamia llevar a cabo otra gran innovación: el inicio de un sistema de relaciones comerciales a larga distancia. Esto supone una gran innovación porque nunca antes se había podido llevar a cabo este tipo de relaciones comerciales, ni en las distintas fases del neolítico, ni en los distintos periodos culturales del Calcolítico.
CARACTERÍSTICAS INNOVADORAS DEL COMERCIO
Un primer factor innovador dentro de este nuevo sistema de comercio es el incremento de las necesidades de materias primas que venían de zonas lejanas, es decir, que se demandaban cosas que no se podían conseguir en su entorno más cercano. Las principales cosas que se empezaron a necesitar cada vez en mayor medida son: metales para fabricar herramientas y armas, madera para construir las cubiertas de los grandes edificios, piedras duras para los sellos, la ostentación de los ricos y el embellecimiento de los templos. En cuanto al modo de desplazamiento de estas mercancías, hablamos de un mayoritario transporte fluvial, tanto por el río Tigris y Éufrates como a veces por el golfo Pérsico; y también de un transporte terrestre por burros cargados que a veces podían estar protegidos por escoltas para asegurar la llegada a su destino.
Un segundo factor innovador es la propia organización del comercio, sentando las características que definirán las actividades comerciales durante toda la Edad del Bronce del Próximo Oriente Antiguo. Pues bien, este comercio será concentrado y organizado por las grandes organizaciones de las que hablaba el pasado día (templos y palacios). Estas grandes organizaciones se reservan parte de los excedentes disponibles para intercambiarlos con otras zonas por productos que ellos mismos no podían producir. Para llevar a cabo los intercambios están los agentes comerciales, que parten una vez al año del centro urbano de la Baja Mesopotamia en el que viven para llevar productos manufacturados a regiones lejanas y volver a su centro de origen con los productos que han obtenido.
OTRAS CARACTERÍSTICAS
Sin embargo, tampoco es que este nuevo comercio se reduzca simplemente al viaje de unos agentes comerciales de un lugar a otro. Entre el sitio de la Baja Mesopotamia en el que vivían, y el sitio lejano al que iban a intercambiar sus productos había una serie de lugares intermedios. Por otra parte, hay que decir que esas regiones lejanas que exportan sus materias primas naturales habrían organizado y adecuado su producción a esos intercambios de carácter anual. También quiero destacar otra cosa, y es que desconocemos bastante cómo se debió de llevar en la práctica el momento del intercambio en sí, aunque se supone que tuvo que tener un carácter ritual y ceremonial. Tampoco sabemos hasta qué punto habría llegado la corrupción de los agentes comerciales, en el sentido de no presentar ante las grandes organizaciones todos los productos que realmente había obtenido. ¿Y por qué no se sabe nada acerca de estas cosas? Pues sencillamente porque no hay fuentes de conocimiento escritas para esto, ya que se consideraba que eran temáticas totalmente irrelevantes para la escritura.
Las regiones periféricas que existen alrededor de los centros urbanos estaban poco pobladas pero eran ricas en materias primas, por lo que tenían la obligación de aportar sus riquezas naturales para el sostenimiento y crecimiento del centro urbano central, sin esperar una relación de trueque recíproca. Visto lo visto, podemos decir para sintetizar un poco que el crecimiento de estos centros proto urbanos tiene la consecuencia de la centralización de la actividad comercial en torno a las grandes organizaciones. Sin embargo, esta centralización es más bien ideológica, porque estos centros dependían de la producción de alimentos de las aldeas productoras y del abastecimiento de materias primas de las regiones periféricas.
LAS COLONIAS URUK
1) Zonas de difusión:
La revolución urbana que vimos en la anterior entrada, y que tiene uno de sus máximos referentes en la ciudad de Uruk, no se quedó solo en la zona de la Baja Mesopotamia, obviamente. Tomando como punto de partido esta zona, la revolución urbana (conocida también como la primera urbanización) se extiende por cuatro grandes zonas a nivel general: la zona de la Media Mesopotamia, la zona de la Alta Mesopotamia, la zona del curso alto del río Éufrates, y ciertas zonas del oeste de lo que hoy es Irán.
2) Grado de imitación:
Estas «colonias» fundadas en distintas zonas del Oriente Próximo Antiguo siguen para su construcción el patrón cultural de la gran ciudad hegemónica, Uruk, aunque en mayor o menor medida dependiendo de la zona a la que nos refiramos. De las cuatro zonas que nombré antes, las dos primeras imitan casi totalmente el modelo urbano de Uruk, mientras que las dos últimas lo imitan solo en parte. En cuanto a la funcionalidad de estas colonias, cabe decir que fueron usadas sobre todo con fines comerciales, siendo zonas intermediarias entre las zonas de comercio y los núcleos urbanos de la Baja Mesopotamia.
3) Modo de fundación:
Por otra parte, también podría hablarse de cómo fue la fundación de esas colonias, distinguiendo dos posibilidades: las que se fundaron sobre sitios donde ya habían existido comunidades humanas anteriormente, o las que se fundaron en sitios nunca antes poblados por los humanos. Al menos desde mi punto de vista, este segundo grupo es el más interesante, porque los arqueólogos pueden comprobar cómo en un lugar se pasa de la nada a ser un centro urbano. Por si queréis saber más, os diré que los casos más llamativos son los yacimientos sirios de Habuba Kebira y Yébel Aruda, precisamente por contar con un modelo urbanizador que poco tiene que ver con el de Uruk.
