Fragmento de un artículo sobre la guerra de sucesión española publicado por mí en la web de QueAprendemosHoy el día 22/01/2018.
Introducción
La guerra de sucesión española fue un enfrentamiento bélico (1702-1713) producido por las luchas de los candidatos a ocupar el trono de España tras la muerte sin herederos del rey Carlos II (1665-1700). En esta entrada vamos a hacer un breve repaso de esta contienda, desde sus antecedentes hasta los escenarios en los que se libró la guerra y las grandes consecuencias que tuvo.
Antecedentes a la guerra de sucesión española
En el año 1689, la reina consorte María Luisa de Orleans muere, por lo que Carlos II se casa con Mariana de Neoburgo, un territorio de Berlín cuyo conde titular era uno de los que presidían las dietas de elección del emperador. Mariana de Neoburgo constituyó un grupo de oposición a la reina madre, Mariana de Austria, dominando claramente a su esposo Carlos II.
Desde inicios de su reinado, Carlos II tuvo que enfrentarse a diversas teorías de conspiración sobre el futuro de la corona española. Hay un primer tratado clandestino en 1668 entre Leopoldo de Austria y Luis XIV de Francia por el que ambos se ponían de acuerdo para repartirse la herencia española si Carlos II moría sin hijos, ya que ambos tenían lazos de sangre con la monarquía española.
En la Guerra de Sucesión Española van a existir tres bandos, encabezados cada uno por un candidato al trono español: el partido francés, encabezado por la pretensión al trono de Felipe de Anjou, nieto de Luis XIV; el partido bávaro, que apoyaba a Fernando de Baviera, nieto del emperador del Sacro Imperio; y el partido alemán, que apoyaba a Carlos de Austria, nieto del emperador del Sacro Imperio.
En su testamento, Carlos II establece su favoritismo por la sucesión de la herencia española para Fernando de Baviera. El problema es que éste muere, por lo que a partir de ese momento la disputa gira entre Felipe de Anjou y el Archiduque Carlos de Austria. Finalmente, en 1700, tras la muerte de Carlos II, deja como heredero de la corona a Felipe de Anjou, que pasará a ser Felipe V de España. Sin embargo, había una cláusula que establecía que si quería ser rey de España en teoría debía renunciar a llegar a ser rey de Francia. Esto se hacía para que dos de las monarquías más poderosas del mundo, como eran la española y la francesa, no reposaran en los hombros de la misma persona.
La guerra de sucesión española: partidarios y detractores
La proclamación de Felipe V como rey español va a ser aceptada en un principio por las monarquías europeas de Inglaterra y Holanda. No obstante, su aceptación habría sido una forma de ganar tiempo, ya que ciertas medidas de Luis XIV de Francia habían hecho que se produjera una coalición en contra de él, teniendo como resultado el apoyo al candidato austríaco.
En ese momento, España se colocó bajo el tutelaje de Francia. Rápidamente, fue rechazado por las otras potencias porque rompería los equilibrios de poder ya mencionados. Este tutelaje se tradujo en que las plazas fuertes hispanas en la frontera con Francia fueron ocupadas por los franceses. También en que Luis XIV puso a un gobernador francés en territorios holandeses.
Aun así, hubo algo que finalmente decidió a Inglaterra y Holanda a ponerse en contra de Felipe V. Fueron la serie de concesiones americanas que se hacían a Francia. Estas concesiones de territorios fueron a través de la llamada Compañía de Guinea, que le quitaba a los holandeses el casi monopolio que tenían sobre el comercio de esclavos. Una vez que se definieron los bandos, a esta gran alianza contra España y Francia se sumaron potencias. Algunas de ellas fueron el imperio austríaco, Prusia, la mayor parte de los estados alemanes, Portugal y el ducado de Saboya.
Escenarios de la guerra de sucesión española
La guerra comenzó en 1702 y terminó en 1713, si bien es verdad que los enfrentamientos bélicos habían terminado antes. No obstante, Cataluña, bastión anti borbónico contra Felipe V, resistió en la lucha hasta 1714. A la Guerra de Sucesión Española se le suele considerar como un remoto antecedente de la primera guerra mundial por su gran extensión y participación internacional.
Como guerra europea, se libra en los Países Bajos españoles, en la frontera franco italiana, en Alemania, y en los territorios peninsulares. En la península concretamente se van a enfrentar los ejércitos borbónicos de Felipe V sumados a los franceses que los apoyan contra los ejércitos austrasistas de Inglaterra, Austria y Holanda. Simbólicamente, esta guerra fue la primera gran guerra civil de la historia de España. La causa es sencilla de comprender, ya que Cataluña ocupaba buena parte de la Corona de Aragón.
Posiblemente, esta «rebelión» de la corona aragonesa, con Cataluña a la cabeza, tenía motivos económicos. La burguesía catalana veía beneficioso rebelarse a España. En 1705, se produce un encuentro paradigmático. Un representante de la corona inglesa con dos catalanes enviados por un grupo austracista. Destacar que ninguno de ellos eran representantes de ninguna institución catalana. De esta reunión nace el Pacto de Génova. Según este, Inglaterra enviaría tropas a Cataluña para defender las pretensiones del archiduque Carlos. Por eso, en el tratado de Utrech de 1713 aparece un artículo que recoge la situación de los catalanes. Finalmente, Inglaterra se olvidará de los catalanes y los abandonará.
Fragmento de un artículo publicado por mí en la web de QueAprendemosHoy el día 22/01/2018.
Bibliografía
FLORISTÁN IMÍZCOZ, A.: Historia de España en la Edad Moderna. Ariel, 2004.
GARCÍA CÁRCEL, R. (Coord.): Historia de España: siglo XVIII, la España de los Borbones. Cátedra, 2002.