Saltar al contenido
HISTORIAE

Causas de la Segunda Guerra Púnica

Introducción

Se conoce con el nombre de Guerras Púnicas a la larga serie de conflictos que enfrentaron a Roma y Cartago durante más de un siglo, concretamente entre el 264 y el 146 a.C. El origen del nombre de las Guerras Púnicas reside en la forma que tenían los romanos de llamar a los cartagineses, apelando al etnónimo punici. La gran duración de las Guerras Púnicas a lo largo de 118 años no fue continuada e ininterrumpida en el tiempo, sino que se dividió en tres fases distintas: la Primera Guerra Púnica (264 – 241 a.C.), la Segunda Guerra Púnica (218 – 201 a.C.) y la Tercera Guerra Púnica (149 – 146 a.C.). En este artículo veremos cuáles fueron las causas de la Segunda Guerra Púnica, motivadas sobre todo por la presencia de los Bárquidas en la península Ibérica.

Resumen de la Segunda Guerra Púnica

Antes de empezar a hablar del estallido del conflicto, me parece apropiado hacer un muy breve resumen de la Segunda Guerra Púnica, a modo de introducción. Para comenzar, cabe decir que la paz firmada en el 241 a.C. duró lo mismo que la guerra a la que puso fin: veintitrés años. Aunque en el periodo de entreguerras hubo tensiones, lo cierto es que las relaciones entre Roma y Cartago no eran hostiles. De hecho, se habían reiniciado los contactos comerciales, de modo que comerciantes púnicos estaban tan presentes en Roma como los latinos en Cartago.

Aun así, nadie puso demasiadas objeciones cuando Aníbal Barca encendió la mecha de una nueva guerra al emprender el asedio de Sagunto, una ciudad ibérica protegida por Roma. Después de la declaración de guerra de Roma, Aníbal inició en la primavera del 218 a.C. su legendaria marcha hacia Italia partiendo desde Cartagena. Tras una serie de grandes victorias (en la batalla de Cannas, por ejemplo), el líder cartaginés fracasó en su intento de llegar directamente a Roma en el 211 a.C.

En el mismo año, los romanos Cneo y Publio Cornelio Escipión, que habían llegado a Hispania en el 217 a.C., fueron derrotados y fallecieron en una batalla, provocando la entrada en acción de Publio Cornelio Escipión el Africano. Luego de haber asumido el mando del ejército, conquista Cartagena (210 a.C.), derrota en Baécula al ejército cartaginés de Asdrúbal Barca (209/208 a.C.) y acaba con él al año siguiente a orillas del río Metauro (207 a.C.). Asimismo, derrota a los púnicos en Ilipa (206 a.C.) y lleva a cabo una famosa y triunfal expedición a África (204-203 a.C.). Finalmente, tiene lugar la victoria romana en la batalla de Zama, tras la cual el destino de la guerra estaba decidido.

Escipión el Africano liberando a Massiva, obra de Tiepolo sobre el gran personaje de la segunda guerra púnica
Escipión el Africano liberando a Massiva, obra de Giovanni Battista Tiepolo (siglo XVIII)

Causas de la Segunda Guerra Púnica: Sagunto

Si tuviéramos que hacer un mapa de la Segunda Guerra Púnica, el primer punto destacado a señalar sería Sagunto, una próspera y fortificada ciudad ibérica en la costa mediterránea valenciana que mantenía relaciones comerciales con los griegos. Al ver el avance de los cartagineses de Asdrúbal en la península Ibérica, las tensiones internas entre una facción favorable a los púnicos y otra a los romanos llevó a los saguntinos a decantarse al final por pedir ayuda a Roma para conservar su independencia.

A pesar de que todo salió bien para Sagunto, puesto que eliminó a la facción procartaginesa sin necesidad de una intervención militar romana, la independencia tuvo un inesperado efecto secundario. Ya fuera por acciones diplomáticas o militares, todas las tribus circundantes se habían pasado al bando cartaginés, por lo que la prorromana Sagunto era un latente peligro para los intereses del nuevo líder del ejército, Aníbal Barca.

Antes de que comenzara la Segunda Guerra Púnica en Hispania, una embajada romana fue enviada a entrevistarse con Aníbal en Carthago Nova para recordarle el Tratado del Ebro e instarle a no atacar Sagunto. Después de que el líder de los Bárquidas los acogiera con frialdad y les recriminara la limpieza de cartagineses sufrida en Sagunto, los legados viajaron a Cartago, donde no obtuvieron mejores resultados.

Ilustración que recrea la conquista de Sagunto por parte de Aníbal, causa de la Segunda Guerra Púnica
Ilustración que recrea la conquista de Sagunto por parte de Aníbal Barca (Fuente: Arrecaballo)

Finalmente, en la primavera del 219 a.C., Aníbal Barca emprendía el sitio de Sagunto, que, tras ocho meses de asedio, cayó en manos de los púnicos sin que los romanos hicieran nada. Además, Aníbal dejó que sus soldados se dedicaran al pillaje para compensar el esfuerzo de esos meses e impuso un castigo ejemplarizante a los supervivientes de la ciudad para advertir a aquellos que quisieran distanciarse de Cartago en el futuro.

Aníbal y la Segunda Guerra Púnica

A finales del invierno del 218 a.C., Roma envió una embajada a Cartago encabezada por los dos cónsules salientes del 219 a.C., Lucio Emilio Paulo y Marco Livio Salinator, y el censor Marco Fabio Buteo. Entre otras cosas, querían saber si Aníbal había actuado por iniciativa propia o respondiendo a las órdenes de la metrópolis, ya que, si fuera el primer caso, Cartago podría evitar entrar en una nueva guerra entregando a su general para que fuera castigado por los romanos. Cuando los cartagineses se negaron a vender a su gran líder militar atravesaron el Rubicón, por lo que la declaración de guerra se hizo efectiva.

En general, la conquista de Sagunto solo fue la gota que colmó el vaso de los púnicos, ya que las causas de la Segunda Guerra Púnica estaban ahí desde el mismo final del primer enfrentamiento. Amílcar Barca nunca pudo dejar atrás el rencor a los romanos por haber tenido que rendirse en Sicilia cuando no había sido derrotado. También, no pudieron olvidar la humillante anexión romana de Cerdeña, que lo único que consiguió fue multiplicar el odio hacia Roma entre los dirigentes de Cartago.

Aníbal vencedor contempla por primera vez Italia desde los Alpes, obra de Goya sobre la segunda guerra punica
Aníbal vencedor contempla por primera vez Italia desde los Alpes, obra de Francisco de Goya hecha en 1770

Por este motivo, Amílcar y su familia (incluido un joven Aníbal de tan solo 9-10 años) habían partido a la península Ibérica con el claro objetivo de sentar las bases de un poder que sería utilizado en un futuro contra Roma. Y lo cierto es que lo consiguieron a todos los niveles. Cuando estalló la Segunda Guerra Púnica en la península Ibérica, los aliados militares hispanos de Cartago eran numerosos, los tributos impuestos a los pueblos sometidos nutrían hasta rebosar las arcas públicas de la metrópolis, y la explotación de los recursos del subsuelo producía un gran superávit comercial. Vista así la situación, nada parecía indicar que las consecuencias de la Segunda Guerra Púnica serían tan desastrosas. 

Bibliografía

BARCELÓ, P. (2019): Las guerras púnicas. Madrid: Editorial Síntesis.

GOLDSWORTHY, A. (2002): La caída de Cartago. Las Guerras Púnicas 265 – 146 a.C. Barcelona: Ariel Historia.

GONZÁLEZ WAGNER, C.: «Los bárquidas y la conquista de la Península Ibérica», en Gerión, 1999, Nº 17, pp. 263-294.

ROLDÁN HERVÁS, J.M. (2007): Historia de Roma I. La República Romana. Barcelona: Ediciones Cátedra.

ROLDÁN HERVÁS, J.M. (2013): Historia antigua de España I. Iberia prerromana, Hispania republicana y Alto Imperial. Madrid: Universidad Nacional de Educación a Distancia.

Resumen
Causas de la Segunda Guerra Púnica (218 - 202 a.C.): Aníbal y Sagunto
Nombre del artículo
Causas de la Segunda Guerra Púnica (218 - 202 a.C.): Aníbal y Sagunto
Descripción
Breve resumen de la Segunda Guerra Púnica (218 - 202 a.C.), abordando sus causas en Hispania, sobre todo la conquista de Sagunto
Autor
Web
Historiae
Logo de la web

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Información básica sobre protección de datos Ver más

  • Responsable: Óscar Hernández Abreu.
  • Finalidad:  Moderar los comentarios.
  • Legitimación:  Por consentimiento del interesado.
  • Destinatarios y encargados de tratamiento:  No se ceden o comunican datos a terceros para prestar este servicio. El Titular ha contratado los servicios de alojamiento web a Sered.net que actúa como encargado de tratamiento.
  • Derechos: Acceder, rectificar y suprimir los datos.
  • Información Adicional: Puede consultar la información detallada en la Política de Privacidad.

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.